Abstract

Este ensayo se enfoca en las reflexiones de Aristóteles sobre el ser humano - sobre la humanidad no como algo dado, sino como un hecho en devenir, entendido como una tarea. Resalto el trabajo constructivo involucrado en el proceso de llegar a hacerse humano, y muestro que, lejos de una construcción en su carácter meramente técnico-mecánico, está en juego un proceso formativo que en buena medida se desenvuelve en la oscuridad y carece de guías eidéticas claras. En efecto, es a través de dicho proceso, de semejante tanteo en la oscuridad, como se puede llegar a obtener, si es que esto es posible, claridad eidética. En el análisis del extraordinario artefacto que es el ser humano, discuto cuestiones relativas a la indemostrabilidad de los primeros principios, el carácter arquitectónico de la ética y su función fundamental respecto a las demás empresas humanas incluyendo las disciplinas científicas, la relación entre constitución humana y naturaleza, y problemas sobre la libertad, la autorrealización y la autosuperación.