Abstract
La idea de que las teorías separadas por una revolución científica son inconmensurables fue sugerida, de manera independiente, por Thomas S. Kuhn (1962) y Paul Feyerabend (1962) a inicios de la década de 1960. Desde entonces y hasta nuestros días, la tesis de inconmensurabilidad, así como sus polémicas implicancias, han ocupado un papel protagónico en las discusiones en torno a los estudios acerca de la ciencia.1 Un variado número de problemas derivados de la tesis de inconmensurabilidad, tales como el cambio de significado, la referencia de los términos teóricos, la racionalidad y los aspectos cognitivos del cambio científico, sus implicancias para las concepciones realistas y anti-realistas acerca de las teorías científicas, entre otros, pueden encontrarse analizados en una importante compilación de trabajos de un número de distinguidos investigadores editada por Paul Hoyningen-Huene y Howard Sankey, y publicada por primera vez hace ya más de una década bajo el título Incommensurability and related matters (Hoyningen-Huene & Sankey, 2001).