Abstract
Este artículo hace parte de un proyecto de investigación que, en general, busca determinar si algunos desacuerdos pueden ser comprendidos como un campo de argumentación en el que los disensos no se resuelven a pesar de que no necesariamente hay malentendidos lingüísticos o conceptuales y en virtud de la naturaleza de la constitución de algunos fenómenos sociales humanos. En este artículo se arguye que para comprender en qué sentido hablan de lo mismo dos personas que discrepan, para comprender un sentido en el que el malentendido no sustituye al desacuerdo, para eso, no son suficientes y más bien habría que disolver las siguientes oposiciones: Primero, la oposición entre la interpretación de cada uno y el objeto sobre el cual se ejerce la interpretación; y, segundo, entre la concepción que cada uno defi ende y el concepto al que los discrepantes se refieren. Con este fi n se disponen dos partes, en la primera se exponen tres explicaciones del desacuerdo que constituyen los antecedentes de esta discusión y en la segunda se expone la cuestión de si los querellantes hablan de lo mismo.