Abstract
Este artículo retoma la cuestión del espacio en Gilles Deleuze. Examinamos al respecto tres motivos: un concepto original de cartografía, una teoría de las geografías afectivas, y un análisis de los vectores «territorializantes» y «desterritorializantes» que determinan las transformaciones de las identidades colectivas. A través de estos tres momentos, la espacialidad deviene en los trabajos de Gilles Deleuze la piedra angular de una renovación de la vocación crítica de la filosofía. Dejando de ser un objeto de reflexión entre otros, la espacialidad se vuelve un esquema de pensamiento, una manera de plantear problemas y de construir conceptos, donde ya no se trata de construir una filosofía de la geografía, sino una «geofilosofía».