Abstract
Este trabajo trata de aplicar el modelo teórico de la relación entre la división etnoracial y el Estado penal en los Estados Unidos al fenómeno del extraordinario incremento de la encarcelación de los inmigrantes postcoloniales en la Unión Europea durante las dos últimas décadas en la era del neoliberalismo triunfante. La construcción de la “Europa fortaleza” en la era de la flexibilización del trabajo y de la inseguridad social generalizada, ha acelerado un doble movimiento que condena al ostracismo a los inmigrantes. El primero actúa a través del traslado externo, mediante la expulsión, de los inmigrantes irregulares. El segundo opera a través de su extirpación interna mediante el incremento de su encarcelación. Estos dos procesos se dirigen directamente contra las poblaciones que expresan el “exterior”, tanto desde punto de vista social como simbólico, de la emergente Europa postnacional, a saber, los inmigrantes postcoloniales y sus descendientes más inmediatos.