Abstract
Aunque el entorno supone una fuente de orden para la organización de sus propios componentes, su amplitud y generalidad mantiene siempre abierta la posibilidad de transgredir la trayectoria histórica de decisiones que en última instancia dan forma y constitución a cada uno de sus componentes. En este sentido, el entorno no es un espacio pasivo e independiente donde se reproducen simplemente los acontecimientos, sino un sistema activo que fluye y se transforma en función de las relaciones que se producen en él. A través de una aproximación hermenéutica a la filosofía especulativa de Alfred N. Whitehead, el presente artículo analiza, desde un punto de vista cosmológico, las relaciones que constituyen el entorno en el que devienen las sociedades y los individuos. No obstante, y aunque una sociedad funge como el entorno de éstos últimos, se verá que la propia sociedad es también una entidad individual inmersa en un entorno –cada vez– más amplio y general en el que interacciona con otras sociedades más o menos heterogéneas. Desde esta perspectiva, la influencia del entorno podrá entenderse como el principio de orden que justifica el proceso mediante el cual evoluciona toda entidad, tanto social como individual. _Palabras clave:_ Whitehead - Cosmología del proceso – Orden – Entorno – Relación – Generalidad __.