Abstract
El Programa de filosofía con y para niños ‘FiloHilo’ surgió de la posibilidad de trasladar desde el Prácticum a las aulas procesos de innovación y renovación pedagógica basados en el diálogo y la práctica filosófica. Son multitud los estudios que nos permiten afirmar que la Filosofía para niños/as se ha transformado en una actividad efectiva, posible y necesaria para todas las edades, ya que atiende a la necesidad propia del ser humano: la pregunta, el cuestionamiento, la duda. Pero estos procesos se instauran si hay una actitud de apertura y disposición por parte del profesorado: esa primera condición, la actitud de apertura y disposición, es sobre la que se centra este artículo y fue el germen de preguntas clave: ¿cómo percibe el profesorado estas prácticas?, ¿las conocen?, ¿las han utilizado alguna vez?, ¿tienen predisposición a su implantación?, ¿está preparado para desarrollar un pensamiento ético, reflexivo, solidario y crítico en las aulas? Con el objetivo de responder a ello, se elaboró un cuestionario compuesto por 31 ítems y 4 dimensiones, que posee altos niveles de fiabilidad (α=0.949). Fue enviado a todos los centros educativos gallegos y respondido por 167 docentes. Los resultados muestran una alta predisposición hacia la práctica filosófica, fundamentalmente, por apoyar el razonamiento crítico y la toma de conciencia. Se concluye demandando un abordaje diferente de la enseñanza de la filosofía, tomando en cuenta las necesidades y los intereses del profesorado e introduciendo la necesidad de formación en el ámbito de la práctica filosófica, entendiendo la filosofía como algo que se practica y puede transformar la vida de los alumnos y alumnas: autoconocimiento y autorrealización.