El largometraje La llorona (Jayro Bustamante, 2019) persigue contribuir a la restitución de una deuda histórica con el pueblo indígena guatemalteco; una deuda no satisfecha plenamente con los acuerdos de paz de 1996. El pasado espectral viene encarnado en Alma, la sirvienta maya kaqchikel que entra a trabajar en la casa del general Monteverde, responsable del genocidio de las comunidades indígenas cuando era presidente del país centroamericano. Al invertir la idea del haunting, o tormento, son el torturador y su (...) familia lxs que se ven acosados por sus acciones pasadas, que hasta ahora habían quedado impunes, no solo a nivel jurídico, sino también a nivel moral. La figura metafórica de “La Llorona”, que llora desconsolada más allá de la muerte porque sus hijos han sido asesinados frente a ella, desencadena el terror que vivirá la familia protagonista, obligada a enfrentarse al pasado en el contexto del juicio popular contra Monteverde. La lujosa mansión del expresidente, una casa tomada, rodeada de manifestantes clamando por sus desaparecidxs, se volverá un espacio asfixiante capaz de atentar contra sus habitantes como respuesta a las demandas de justicia. Este artículo se interroga sobre tres aspectos fundamentales de la película. En primer lugar, cómo se elabora audiovisualmente el contra-archivo del juicio de Ríos Montt en 2013, de quien Monteverde es trasunto en la ficción. En segundo lugar, de qué manera se movilizan las politics of haunting negociando un discurso que transciende el género de terror y entronca con el de denuncia social. Y finalmente, cuáles son los procedimientos que utiliza el filme para presentar la resistencia indígena y la decolonialidad como opciones para construir el presente democrático en Guatemala. (shrink)

Desde sus inicios, el cine estuvo fuertemente ligado con la literatura a partir de las adaptaciones de novelas, la divulgación del patrimonio literario, el análisis de la subjetividad, la teoría de los géneros, la aplicación de las categorías de la narratología para el estudio de las especificaciones fílmicas, entre muchos otros. Este estudio toma dos relatos literarios y los compara a través de orientaciones metodológicas y teóricas de la narratología con la versión animada de La Leyenda de la Llorona, (...) para determinar similitudes y diferencias. Asimismo, analiza ciertos elementos del lenguaje cinematográfico que tienen concordancia con las obras literarias para entender que los vuelve diferentes y específicos. (shrink)

Este trabajo reúne tres entrevistas al cineasta guatemalteco Jayro Bustamante, al director de fotografía Nicolás Wong Díaz y al ingeniero de sonido Eduardo Cáceres Stackmann. Los tres colaboraron en la elaboración de la película La Llorona (2019), tercer capítulo de una trilogía cinematográfica inaugurada por Ixcanul (2015) y Temblores (2019), dedicada a las problemáticas sociales y políticas de la Guatemala contemporánea. Se trata aquí de explorar los ejes creativos de dicho tríptico y se ubican en perspectiva las experiencias y (...) sensibilidades de estas tres figuras destacadas del cine centroamericano. (shrink)

And what if we also learn to listen for silence?This article is one in a series of attempts on my part to think the inbetween of traditionally juxtaposed claims of voice versus silence. It takes seriously both claims that voice is lived as liberatory by many, on the one hand, and that words may be inadequate to bear witness to the humiliation, pain, and systematic degradation of trauma and violence, on the other. Thus situated, I turn to silence to locate (...) resources for the renewal of sense. Specifically, I propose that the mobilization of silences can be a powerful decolonizing praxis. Attending to Gloria Anzaldúa's iterations of the myth of la Llorona in "My Black Angelos" and Prietita and the Ghost Woman,1... (shrink)

In this article I use the tropes of El Cucuy (the Mexican version of the boogyman), La Llorona (the wailer), and La Migra (the border patrol) to provide the beginnings of an ethical critique of the treatment of undocumented immigrants in the United States.

We study the Tychonoff Compactness Theorem for several different definitions of a compact space.

Derrida's purpose in ‘Death Penalties’ (2004), is to show how both arguments in favour of capital punishment, exemplified by Kant's, and arguments for its abolition, such as those of Beccaria, are deconstructible. He claims that ‘never, to my knowledge, has any philosopher as a philosopher, in his or her own strictly and systematically philosophical discourse, never has any philosophy as such contested the legitimacy of the death penalty.’ (2004, 146) Derrida also asks how it is possible ‘to abolish the death (...) penalty in a way that is based on principle, that is universal and unconditional, and not because it has become not only cruel but useless, insufficiently exemplary?’ (2004, 137) In my paper, I examine Derrida's claim about the lack of systematic opposition to the death penalty on the part of philosophers and suggest an answer to his question concerning the possibility of a universal and unconditional opposition to capital punishment. (shrink)

Bevezetés Márton Áronnal -- Érett személyiségért -- "Ti vagytok a föld sója" (Mt. 5,13) -- Egyértelmű világnézetet! -- Jelenlét a világban -- Egyház a világban -- Állam és demokrácia -- Helyzettudat változatai -- A társadalom felépítése -- Az egész lakott föld.

La presente contribución recoge el diálogo mantenido entre distintos filósofos del Derecho a propósito de la última obra del Profesor Massimo La Torre “Il diritto contro se stesso. Saggio sul positivismo giuridico e la sua crisi”. Al hilo del trabajo del citado autor, los participantes reflexionan sobre preguntas centrales para la teoría y filosofía del Derecho contemporánea: ¿cuál es la naturaleza del Derecho? ¿es el razonamiento jurídico eminentemente moral? ¿qué lugar debe ocupar la práctica jurídica en su conceptualización? ¿qué lugar (...) ocupa la fuerza en el Derecho? (shrink)

We specify two problems in syllogistic: the lack of functoriality of predicates (although a thief is a person, a good thief may not be a good person) and the change of grammatical role of the middle term, from subject to predicate, in some syllogisms. The standard semantics, the class interpretation, by-passes these difficulties but, we argue, in a manner that is at odds with logical intuition. We propose a semantics that is category theoretic to handle these difficulties. With this semantics (...) we specify when syllogisms are valid and we set limits to the class interpretation. To perform this task we show how to construct the categorical notion of an entity in a system of kinds. We devote two brief sections to an argument that our approach is very much in the spirit of Aristotle. (shrink)

One evening years ago I was watching a performance of the Chinese Magic Circus of Taiwan when it suddenly came to me that the fundamental characteristics of comedy were being acted out before my eyes. The discovery seems ironic in retrospect, as I did not find the performance very amusing, but the crude simplicity of the act illuminated the underlying dynamics of the genre. Two Taiwanese clowns came on stage dressed in the traditional white coverall and floppy hat that signify (...) a chef. One of them announced that he and his companion were Puerto Rican chefs, and they proceeded to set up a row of nine springy bamboo poles, each about seven feet high, each one stuck vertically into a firm base and separated from the. (shrink)